Quito, 23 junio de 2022.-
En este artículo les presentamos la sistematización de la charla magistral que presentó Roberto Falconí, director nacional de Tecnología de Puntonet, en el V Congreso Smart City Ecuador 2022.
Cuando hablamos de “Smart cities” es importante preguntarse, ¿cómo las nubes sirven para optimizar la información en las ciudades inteligentes, en economía, movilidad, medio ambiente, educación, salud?, entre otros; y así evaluar a las ciudades con base en datos. Este análisis nos servirá para saber desde dónde partir, por ejemplo, Quito ocupa el lugar 142 en el ranking de la ciudades inteligentes y Guayaquil el 164, en comparación con ciudades como Santiago de Chile y Buenos Aires que están en el top 5 de Latinoamérica; estas principalmente nos superan por su planificación urbana, tecnología, movilidad y transporte, según el Ranking de Ciudades Inteligentes 2020 de IECE Cities in Motion.
Otros puntos para considerar y evaluar son el procesamiento y almacenamiento de datos en la nube y, la posibilidad de que estos puedan ser compartidos entre distintas entidades y organizaciones con el objetivo de agilizar procesos; así como también, las tecnologías que están siendo usadas desde el internet de las cosas, el big data, la inteligencia artificial y el aprendizaje profundo. Es decir, la analítica que se debe implementar en todos los procesos para lograr definir qué tipo de datos e información son útiles cuando están ya disponibles en la nube.
Para garantizar el proceso de retorno de la información y la analítica de ese proceso, se debe tener en cuenta el tipo de nube al que se ha subido la información y los datos, es decir, si ha sido a una privada, híbrida compleja o pública.
En una encuesta hecha a 58 responsables de ciudades inteligentes dijeron que el 41,9% de la cantidad de los datos en sus nubes provenían de video vigilancia que involucra al reconocimiento facial e imágenes, el 18,2% de semaforización y de información para mejorar el tráfico, el 16,6% del medio ambiente como humedad, clima, polución, el 11,1% de parqueos, el 6,3% de edificios inteligentes y el 5,93% sobre internet gratuito en lugares públicos. Por lo que evaluar el tipo de nube y la inversión que podría involucrar dependerá de la cantidad de datos que procese cada organización, municipalidad o gobierno local.
Los beneficios que la nube aporta a la ciudadanía en las ciudades inteligentes están enfocados en mejorar la seguridad, la gestión del tráfico, planificación de la ciudad y sus riesgos, fomentar el crecimiento sostenible y el mejoramiento del medio ambiente. Este congreso se realizó en el Swissótel de Quito, el 8 y 9 de junio de 2022.